Según especialistas, hay cambios constantes de normativa Analistas: El SIN no es amigable y los errores generan multas

Cambios recurrentes de resoluciones normativas, desconocimiento, saturación de la plataforma digital, notificaciones, fallas en la declaración y llenado de formularios hace que el cumplimiento de obligaciones formales y pago de impuestos sea poco amigable con el contribuyente y se generen multas, advierten expertos.

De hecho, un estudio del Banco Mundial -con datos a 2019- revela que en Bolivia se requiere 1.025 horas al año para preparar y pagar impuestos. Mientras que en América Latina el promedio es de 330 horas.

El abogado tributarista Roberto Carlo Gil explicó que mucha gente no llega a cumplir de manera correcta con sus obligaciones y desde el año pasado hay problemas recurrentes con el sistema de Impuestos Nacionales, el cual no fue diseñado para atender la cantidad de contribuyentes que hay en el país.

Muchas disposiciones que emite la Administración Tributaria y que deben ser de conocimiento general, no son fáciles de acceder porque los contribuyentes no están todos los días buscando las resoluciones. El problema es que luego se enteran fuera de tiempo sobre obligaciones que deberían cumplir, pero ya les generaron multas.

Añadió que quienes cuentan con NIT deben declarar de forma permanente si registraron ventas u otros y también si no hubo movimiento.

Un problema común es que cuando se deja de realizar alguna actividad, no se ha cerrado el NIT y por eso llegan multas pasados tres años o más.

El experto también menciona que gran parte del personal de Impuestos Nacionales está conformado por consultores en línea y que no tienen experiencia. Por eso es que cuando la gente busca asesoramiento, no lo recibe y los problemas se trasladan al personal de planta y la atención se satura.

El abogado tributarista Boris Rentería explicó que en el día a día se presentan modificaciones de sistema, de la normativa y ajustes de plazos que provocan que la gente no declare impuestos o formalidades de manera correcta.

Por otra parte, como muchos contribuyentes entregan la información al SIN a último momento, las plataformas virtuales de la entidad se saturan y el sistema es poco amigable.

Indicó que un problema común es que la gente no declara adecuadamente sus impuestos por diversas razones y en el plazo previsto y eso genera intereses o multas de la deuda.

Cuando se saca el NIT tampoco hay una capacitación al contribuyente y eso provoca errores en la entrega de información y el pago de tributos.

El Servicio de Impuestos Nacionales (SIN), en otra polémica decisión, restringió a sus funcionarios el uso de teléfonos celulares en horas en las que desempeñan labores.

El presidente del SIN, Mario Cazón, prohibió mediante una circular dirigida a sus funcionarios usar teléfonos celulares y memorias de almacenamiento de datos en horario laboral, como medida de seguridad de la información de la institución pública y de los contribuyentes. “A partir del 28 de junio de 2022 queda totalmente prohibido el uso de dispositivos móviles y memorias de almacenamiento de datos (pen drive) durante la jornada laboral, como medida de seguridad de la información de la entidad y los contribuyentes”, señala la Circular 122200000156, firmada por Cazón, dirigida para todos los servidores y consultores individuales de la institución. La disposición fue emitida el 27 de junio pasado.

Argumenta que la medida fue tomada en virtud del artículo 67 de la Ley 2492 sobre confidencialidad de la información tributaria

La disposición fue conocida ayer luego de que la mañana del martes surgieran críticas por un TikTok que publicó el humorista Pablo Osorio sobre el trámite del número de identificación tributaria (NIT).

La administración tributaria calificó el contenido de “difamatorio” y su presidente firmó una carta enviada al humorista para exigirle que retire el video de sus redes, además se le advertía con ser objeto de acciones de ley.

Más tarde, en medio de una ola de críticas en contra de Impuestos, la institución retrocedió y anuló la carta con la cual conminaba al tiktoker.